Una bonita, simpática y curiosa tradición de los deportistas universitarios filipinos (hombres), que todos los años empiezan el curso corriendo desnudos y repartiendo rosas entre sus compañeras. Tiene su mérito, viniendo de un país que no se caracteriza precisamente por su apertura de mente.
madrigal escribió:Muchas gracias poseidon por estas fotos tan curiosas y la verdad es lo que tú dices, es rarísimo que esto pase en un país tan chapado a la antigua
Con mucho gusto amigo...no creas pero Filipinas se está liberando bastante jeje...la prueba: