Tiene esa mezcla perfecta de chulería serbia, sin duda será un gran empotrador, pero al tiempo con un toque tierno, inesperado, que hace todavía más invivible permanecer a su lado sin sentir el látigo de la pasión.
Su mirada es de play boy descarado pero con ese puntito mitad salvaje mitad tierno que te hace ovular solamente al sentirlo cerca.
Un espectacular macho de la tremenda bolsa de maromos duros, folladores de la soberbia Serbia.