Lo siento pero me gustan sus orejas, reconozco que no es el tipo que más agrada a la gente, pero a mí me dan un morbo especial.
De hecho los pibes con ese tipo de orejas siempre me han excitado más, aparte de que ha coincidido que además resultaban algo más simpáticos que la media, quizá estén tan acostumbrados que les afeen ese aspecto que resultan más amables cuando nos ponemos a engancharnos y... por si alguno quiere sacar la gracia, no me importaría que fuera también con sus apéndices.